El Palacio de La Zarzuela, ubicado en Madrid, es donde se encuentra el despacho del Rey de España Felipe VI y la sede de la Casa de Su Majestad el Rey. En el palacio tienen su residencia privada los padres del monarca, los reyes Juan Carlos I y Sofía de Grecia.
En los predios de La Zarzuela se encuentra la residencia privada de los Reyes de España, Felipe VI y Letizia, los cuales residen en un palacete construido en 2002 por Patrimonio Nacional cerca del tradicional inmueble, dentro del recinto.
El nombre posiblemente alude a la abundancia de zarzas. Algunos apuntan a que fue allí donde se celebraron los primeros recitales con música, como el trasunto o correlato de lo que luego sería divulgado y elaborado desde Italia como ópera. La pequeña ópera española, opereta, vino a llamarse zarzuela por ser La Zarzuela el lugar donde se celebraba. El Hipódromo de la Zarzuela, construido en el siglo XX, debería su nombre a la proximidad al palacio. En 1856 se inauguraría el Teatro de la Zarzuela, que debe su nombre a la representación de este género musical.
En 1627 el Rey Felipe IV ordenó la construcción de un pabellón de caza a modo de pequeño palacete en un lugar llamado La Zarzuela, cerca de Madrid. El palacio se terminaría ocho años más tarde.
La obra le fue encargada al arquitecto Juan Gómez de Mora que traza el edificio con una sobria forma rectangular propia del barroco madrileño, con inspiración en las villas del arquitecto de la República de Venecia Andrea Palladio, el cual influyó mucho con sus villas campestres y otras obras durante el neoclasicismo. Los jardines fueron diseñados por Gaspar Bandal.
Alonso Carbonell remató la obra con techados de pizarra, galerías porticadas y un jardín italiano con fuentes escalonadas en tres terrazas, un vivero de árboles y una huerta. Las pinturas colocadas en el palacio fueron obra de Simón López y las esculturas de Bartolomé Zumbido.
Constaba de un edificio rectangular con techo de pizarra con dos pasillos laterales. Carlos IV modificó el edificio para adaptarlo al gusto del siglo XVIII, y lo adornó con tapicería y porcelana, así como con mobiliario y una magnífica colección de relojes.
Sufrió graves daños durante la Guerra Civil y en 1958 el arquitecto Diego Méndez lo reconstruyó conservando su caja primitiva y el muro porticado, recreando además los jardines diseñados el siglo XVII.
Al palacete del siglo XVII se le han ido añadiendo nuevos edificios y, actualmente, la residencia de la familia real se distribuye entre el edificio principal y dos alas adyacentes a derecha e izquierda, construidas en los años 90.
Una rica fauna rodea los alrededores de palacio, enclavado en el monte de El Pardo, cuyos mejores ejemplos son los ciervos, jabalíes y gamos.
El Palacio de La Zarzuela dispone de tres plantas. La primera está ocupada por una zona de desvanes, un semisótano donde se encuentran los servicios de cocina y «office» y un sótano. La segunda planta alberga el despacho del Rey y de sus ayudantes, la biblioteca, la sala de visitas y el comedor. La tercera alberga los dormitorios, habitaciones de invitados y cuartos de estudio. En una de las dos alas construidas en los años 90 se instalaron las habitaciones privadas de la Familia Real y en la otra, las oficinas y los departamento de seguridad. El Palacio posee además una pequeña ermita, una zona deportiva y un helipuerto.
El despacho del Rey estuvo presidido por un retrato de Carlos III en su edad adulta,, y aunque fue sustituido por un retrato del infante Felipe de Parma de niño realizado por Jean Ranc, desde que Felipe VI reina vuelve a estar presidido por el de Carlos III. Se mezclan muebles y objetos de Patrimonio Nacional con objetos personales. Su asiento es un sillón de cuero marrón y patas con ruedas.
Al entrar en el despacho se observa también el cuadro titulado El Atleta Cósmico, de Salvador Dalí. Su escritorio está ocupado por papeles, libros, una lámpara, un reloj y algunos objetos. A la derecha del escritorio, en el suelo, hay varias carteras o maletines de cuero marrón similares a los que usan los ministros, uno de ellos rotulado con las letras "S.M. El Rey". Las paredes del despacho están forradas de madera clara. En la mesa y estanterías hay varios marcos con fotografías familiares, una de ellas firmada por Juan Carlos.
La jura de los ministros, del Presidente del Gobierno y de los magistrados del Tribunal Constitucional se realiza en la Sala de Audiencias del Palacio, decorada con varios cuadros y tapices y también con las paredes forradas de madera clara. La ceremonia se realiza ante una mesa con un crucifijo dorado, un ejemplar de la constitución editado por las Cortes en 1980 y una Biblia de 1791 dedicada a Carlos IV abierta por el capítulo XXX sobre el voto y juramento del Libro de los Números. La Sala de Audiencias también sirve para recibir ante la prensa a invitados de España o del extranjero, aunque a veces esta recepción ante la prensa se realiza en una sala en torno a una mesilla redonda o en la propia puerta del Palacio.
En el año 1999 comenzó la construcción del «Pabellón del Príncipe» a varios centenares de metros de la residencia del Rey. El responsable del proyecto fue Manuel del Río, director del Departamento de Arquitectura e Inmuebles de Patrimonio Nacional, y la decoración del interior la realizaron los decoradores Francisco Muñoz la segunda planta, Patricia Sanchís la primera y ambos con la ayuda de la firma Gastón y Daniela. El chalet posee chimenea francesa, grandes ventanales, muros entelados y estucados en liso, mármol travertino y madera de teka para los cuartos de baño y acero inoxidable para la cocina. Para su construcción, a diferencia de lo habitual en las residencias reales españolas, se ha usado teja en lugar de pizarra. El 26 de junio de 2002 el entonces príncipe Felipe inauguró su casa, en la que se invirtieron 4,23 millones de euros y que cuenta con una superficie de 3.150 m².
A pesar de que la residencia oficial del Rey es el Palacio Real de Madrid, este pequeño palacete se convirtió en la residencia de Juan Carlos de Borbón y Sofía de Grecia a partir de 1962 y con la instauración de la monarquía en 1975 ambos decidieron seguir viviendo en ese lugar junto a su familia.
De esta manera, es habitual repartir los actos oficiales entre ambas residencias; como el caso de la entrega de las Cartas Credenciales de los embajadores o la entrega de condecoraciones, que suelen celebrarse en el Palacio Real de Madrid, o las recepciones de mandatarios extranjeros o juramentos de investidura de políticos nacionales, que suelen realizarse en el Palacio de La Zarzuela.
El Palacio de la Zarzuela se encuentra a las afueras de la capital, al noroeste del centro, dentro del conjunto del monte de El Pardo.
Felipe VI también tiene su residencia en el recinto de La Zarzuela, en un palacete cercano de reciente construcción, situado a unos cuatrocientos metros al este del palacio original, denominado «Pabellón del Príncipe». Las infantas Elena, duquesa de Lugo y Cristina, duquesa de Palma de Mallorca abandonaron el palacio con motivo de su matrimonio, fijando su nueva residencia en Madrid y Barcelona, respectivamente.
Desde 1981 también reside habitualmente en La Zarzuela la princesa Irene de Grecia y Dinamarca, hermana menor de la reina Doña Sofía y del rey Constantino II de Grecia.