|pie_de_foto = Torre Eiffel con amanecer al fondo
| Torre Eiffel | |
|
Torre Eiffel con amanecer al fondo |
|
| Información | |
|---|---|
| Ubicación | Campo de Marte 75007, París, Francia |
| Coordenadas | |
| Estado | Completa |
| Fecha de comienzo | 28 de enero de 1887 |
| Construido | 1887 - 1889 (2 años, 2 meses y 5 días) |
| Finalización estimada | marzo de 1889 |
| Apertura | 31 de marzo de 1889 (Colocación de la bandera francesa en la cúspide) 15 de mayo de 1889 (Apertura al público) |
| Uso | Torre de observación Torre de transmisiones de radio |
| Altura | |
| Altura máxima | 324 metros |
| Azotea | 300,65 metros |
| Planta más alta | 276,13 metros |
| Detalles técnicos | |
| Número de plantas | 3 |
| Área total | 125 metros |
| Número de ascensores | 2 |
| Coste | $1,5 millones de dólares (2007) |
| Compañías | |
| Arquitecto | Stephen Sauvestre |
| Ingeniero de estructuras | Maurice Koechlin Émile Nouguier |
| Constructora | Eiffel et Cie |
| Promotora | Gustave Eiffel & Cie |
| Propietario | Ciudad de París |
La Torre Eiffel (Tour Eiffel, en francés), inicialmente nombrada torre de 330 metros (tour de 330 mètres), es una estructura de hierro pudelado diseñada por el ingeniero francés Gustave Eiffel y sus colaboradores para la Exposición universal de 1889 en París.
Situada en el extremo del Campo de Marte a la orilla del río Sena, este monumento parisiense, símbolo de Francia y su capital, fue el noveno lugar más visitado del país en 2006 y el primer monumento de pago más visitado del mundo con 6.893.000 de visitantes en 2007. Con una altura de 300 metros, prolongada más tarde con una antena a 325 metros, la Torre Eiffel fue el edificio más elevado del mundo durante más de 40 años, hasta que la superó el edificio Chrysler, de Nueva York, en 1930.
Fue construida en dos años, dos meses y cinco días en controversia con los artistas de la época, que la veían como un monstruo de hierro. Inicialmente utilizada para experimentos científicos, hoy sirve, además de atractivo turístico, como emisora de programas radiofónicos y televisivos.
con sus 300 metros de altura.]] .]]
Inicialmente tema de controversia de algunos, la Torre Eiffel sirvió como presentación a la Exposición Universal de París de 1889, la cual acogió a más de 236 millones de visitantes desde su inauguración. Su tamaño excepcional y su silueta inmediatamente reconocible hicieron de la torre un emblema de París.
Concebida en la imaginación de Maurice Koechlin y Émile Nouguier, jefe de la oficina de estudios y jefe de la oficina de métodos, respectivamente, de la compañía "Eiffel & CO", fue pensada para ser el «clavo (centro de atención) de la exposición de 1889 que se celebraría en París», que además celebraría el centenario de la Revolución Francesa. El primer plano de la torre fue realizado en junio de 1884 y mejorado por Stephen Sauvestre, el arquitecto principal de los proyectos de la empresa, quien le aportó más estética.
El 1 de mayo de 1886, el Ministro de Comercio e Industria, Édouard Lockroy, entusiasta partidario del proyecto, firmó un decreto que declaraba abierto «un apoyo para la Exposición Universal de 1889». Gustave Eiffel ganó este apoyo económico y un convenio el 8 de enero de 1887 que fijo las modalidades de construcción del edificio.
.]] Construida en dos años, dos meses y cinco días (de 1887 a 1889) por 250 obreros, se inaugura oficialmente el 31 de marzo de 1889. Sufriendo una corrosión muy frecuente, la Torre Eiffel no conocerá verdaderamente un éxito masivo y constante hasta los años sesenta, con el desarrollo del turismo internacional. Ahora acoge a más de seis millones de visitantes cada año.
Sus 300 metros de altura le permitieron llevar el título de «la estructura más alta del mundo» hasta la construcción en 1930 del Edificio Chrysler, en Nueva York. Construida sobre el Campo de Marte cerca del río Sena, en el 7º distrito de París, actualmente es administrada por la "Sociedad para la administración de la torre Eiffel" (Société d'exploitation de la tour Eiffel, SETE). El lugar, que emplea a 500 personas (250 empleados directos del SETE y 250 de los distintos concesionarios instalados sobre el monumento), está abierto todos los días del año.
| Localización geográfica de la Torre Eiffel | ||
|---|---|---|
| La Torre Eiffel está localizada en el VII Distrito
de París, en Francia, sus
coordenadas geográficas son . A continuación, su ubicación es especificada por zonas o círculos de color rojo. |
||
| En el plano mundial | En el mapa de Francia | A lo largo de la ciudad de París |
|
.]] |
.]] |
, XV y XVI.]] |
| En la escala del VII Distrito | ||
|
, a la derecha de los Campo de Marte.]] |
||
En la imagen y tabla inferiores se indican las principales especificidades técnicas de la torre, haciendo un inventario de las dimensiones del edificio.
| Dimensiones principales de la Torre Eiffel | |
| CIMIENTOS | |
| Altura de la base (sobre el nivel del mar) | 33,5 metros |
| Longitud de la divergencia interior entre los 2 pilares | 74,24 metros |
| Longitud de la divergencia exterior entre los 2 pilares | 124,9 metros |
| 1ª PLANTA | |
| Altura de la primera planta sobre la base | 57,63 metros |
| Altura de la primera planta sobre el nivel del mar | 91,13 metros |
| Lado exterior (al nivel de la planta) | 70,69 metros |
| Superficie (al nivel de la planta) | 4.200 m² |
| 2ª PLANTA | |
| Altura de la segunda planta sobre la base | 115,73 m |
| Altura de la segunda planta sobre el nivel del mar | 149,23 m |
| Lado exterior (al nivel de la planta) | 40,96 m |
| Superficie (al nivel de la planta) | 1.650 m² |
| 3ª PLANTA | |
| Altura de la tercera planta sobre la base | 276,13 m |
| Altura de la tercera planta sobre el nivel del mar | 309,63 m |
| Lado exterior (al nivel de la planta) | 18,65 m |
| Superficie (al nivel de la planta) | 350 m² |
| FECHA | |
| Altura total con antena (año 2000) | 324 m |
| Altura total con antena (año 1994) | 318,7 m |
| Altura total con antena (año 1991) | 317,96 m |
| Altura total con antena (año 1989) | 312,27 m |
| Altura total sin bandera (año 1889) | 300 m |
La información siguiente describe los principales datos técnicos de cada piso, así como las principales curiosidades que se ofrecen al visitante una vez ahí.
| Posición | Dimensiones | Construcción | Diseñadores | Materiales |
| Pies de la torre | Largo : 25 m Altura : 4 m |
1887 | Maurice Koechlin Émile Nouguier Stephen Sauvestre |
Hormigón Grava Acero |
La torre se asienta en un cuadrado de 125 metros de lado, según los mismos términos del concurso de 1886. Tiene 325 metros de altura con sus 116 antenas, está situada a 33,5 metros por encima del nivel del mar.
Los cimientos: los dos pilares situados del lado de la Escuela militar de Francia reposan sobre una capa de hormigón de 2 metros, esta a la vez reposa en una cama de grava, haciendo un hoyo de 7 metros de profundidad. Los dos pilares de la parte del Sena se sitúan incluso por debajo del nivel del río.
Los obreros trabajaron en pozos de cimentación metálicos apretados en los cuales se inyectaba aire comprimido (mediante el denominado método Triger). 16 macizos de cimentación sostienen cada uno de los bordes de los cuatro pilares y algunos enormes pernos de sujeción de 78 dm de longitud fijan el casco en fundición de acero en el cual reposa cada pilar.
Los pilares: actualmente, las casetas para la compra de boletos ocupan los pilares norte y oeste, los ascensores son accesibles desde los pilares este y oeste. Las escaleras (abiertas al público hasta el segundo piso, y que comprenden 1665 escalones hasta la cumbre) son accesibles desde el pilar este. Y finalmente, el pilar meridional comprende un ascensor privado, reservado para el personal y para los clientes del restaurante gastronómico Jules-Verne, situado en el segundo piso.
Los arcos: tendidos entre cada uno de los cuatro pilares, los arcos se elevan a 39 metros sobre el suelo y tienen un diámetro de 74 metros. Aunque en los bosquejos iniciales de Stephen Sauvestre aparecían muy decorados, lo son mucho más hoy en día, pero tienen sobre todo una función arquitectónica: endurecer la estructura de la base.
| Posición | Dimensiones | Superficie | Construcción | Materiales | |
| 57,63 m desde el suelo | Largo : 70,69 m |
4.200 m² | 1887 | hierro pudelado | |
Situado a 57 metros sobre el suelo, con una superficie de 4.200 metros cuadrados, puede soportar la presencia simultánea de aproximadamente 3.000 personas.
Una galería circular colocada en el primer piso permite una vista de 360° sobre París. Esta galería tiene colocados varios mapas de orientación y catalejos que permiten observar los monumentos parisinos. Apuntando hacia el exterior están inscritos los nombres de setenta y dos personalidades del mundo científico de los siglos XVIII y XIX.
Este primer piso alberga el restaurante Altitud 95 que se extiende por más de dos niveles. Este ofrece de un lado, una vista panorámica sobre París, y del otro, una vista hacia el interior de la torre. Su nombre viene de la altitud del primer piso de la Torre Eiffel, situada a 95 msnm.
También puede ver algunas reliquias relacionadas con la historia de la Torre Eiffel, incluyendo una sección de la escalera en espiral que, a inicios de la construcción del monumento, subía hasta la cumbre. Esta escalera fue desmantelada en 1986, durante una importante labor de renovación de la torre. Fue entonces cortada en 22 secciones de las cuales 21 fueron vendidos en subasta, y adquiridas en su mayoría parte por coleccionistas estadounidenses.
Por último, un seguimiento de los movimientos de la cumbre permite describir las oscilaciones de la torre bajo el efecto del viento y la dilatación térmica. Gustave Eiffel había exigido que pudiera soportar un rango de 7 dm de oscilación, que nunca fue el caso, aunque de hecho, durante una ola de calor en 1976, la amplitud de oscilación fue de 18 cm, además de 13 cm durante una tormenta en diciembre de 1999 (cuyo vientos fueron de 240 km/h).
Pierre Affaticati y Simon Pierrat supieron remediar este problema de amplitud en 1982 incorporando materiales compuestos al armazón conexo. Una de las particularidades de la torre es que "huye al sol". En efecto, el calor (y por tanto la dilatación del acero) al ser más importante del lado soleado, la cumbre se está moviendo ligeramente en la dirección opuesta.
| Posición | Dimensiones | Superficie | Construcción | Materiales | |
| 115,73 m desde el suelo | Largo : 40,96 m |
1 650 m² | 1888 | hierro pudelado | |
Situado a 115 metros por encima del suelo, posee una superficie de 1.650 metros cuadrados aproximadamente, puede soportar la presencia simultánea de alrededor de 1.600 personas.
Se considera que es el piso que posee la mejor vista, debido a que la altitud es óptima con relación a los edificios que se encuentran abajo (en el tercer piso, son menos visibles) y a la perspectiva general (obviamente más limitada en el primer piso). Cuando el clima lo permite, se calcula que es posible ver hasta a 55 km al sur, 60 al norte, 65 al este y 70 al oeste.
En todo el piso, se instalaron ventanas de cristal para permitir una vista muy amplia desde arriba. También están instaladas vallas metálicas de protección para evitar cualquier intento de salto al vacío, ya sea un suicidio o un logro deportivo.
El restaurante Le Jules-Verne es un renombrado restaurante gastronómico con una capacidad de 95 asientos, calificado con una estrella por la famosa Guía Michelin y con una calificación de 16/20 según los críticos gastrónomiocs Gault-Millau. Sin cambios desde 1983, año de apertura del restaurante, el decorado, muy sombrío, se funde con discreción en las estructuras metálicas de la torre, además de contar con un gran ventanal que permite tener una bonita vista sobre París. Su jefe, Alain Reix es ayudado permanentemente por una treintena de cocineros y servidores (el personal cuenta con 90 personas en total), diariamente. Un ascensor «privado» (sirve también al personal de mantenimiento de la torre), situado en el pilar meridional conduce directamente a una plataforma de 500 m ², exactamente a 123 metros de altura. En ocasiones, debido a la larga distancia que la clientela del restaurante recorre, los cubiertos son reservados desde un mes antes para la comida del mediodía y tres meses para la de la noche.
| Posición | Dimensiones | Superficie | Construcción | Altura incluida la antena de televisión: | |
| 276,13 m desde el suelo | Largo : 18,65 m |
350 m² | 1889 | 325 m desde el suelo | |
Situado a 275 metros sobre el suelo, con una superficie de 350 m², puede soportar la presencia simultánea de alrededor de 400 personas.
El acceso se hace obligatoriamente por un ascensor (la escalera está prohibida al público a partir del segundo piso) y se llega a un espacio cerrado lleno de mapas de orientación. Al subir algunas escaleras, el visitante llega a una plataforma exterior, a veces denominada (erróneamente) «cuarto piso».
En este piso podemos percibir una reconstitución del tipo «Museo Grévin» que muestra a Gustave Eiffel recibiendo a Thomas Edison, esto refuerza la idea según la cual Gustave Eiffel habría utilizado el lugar como oficina. Aunque la realidad histórica es diferente. En realidad, el lugar había sido ocupado primero por el laboratorio meteorológico, antes de que fuera utilizado por Gustave Ferrié en los años 1910 para sus experimentos de telegrafía sin hilo (TSH). Encima de la torre, fue instalada una antena de teledifusión en 1957, la cual luego sería completada en 1959 para cubrir cerca de 10 millones de hogares mediante la difusión de televisión analógica terrestre. El 17 de enero de 2005, el dispositivo fue completado, cuando la emisora francesa de televisión digital, elevó a 116 el número de antenas de teledifusión y radiodifusión. El añadido de esta 116ª antena hizo crecer la altura de la torre de 324 a 325 metros.
Concebida en 1884, edificada entre 1887 y 1889 e inaugurada para la exposición universal de 1889 en París, la Torre Eiffel simboliza hoy en día a un país entero, Francia.
Sin embargo, no siempre fue así. La Torre Eiffel formó parte del escaparate económico del país.
Desde 1875, la Tercera República naciente, que se caracterizó por la crónica inestabilidad política, apenas se podía sostener.
En el gobierno, los partidos políticos se suceden a un ritmo constante. Según León Gambetta, está a menudo formado por ministros "oportunistas", pero cuya obra legisladora puso las piedras de los principios todavía vigentes en el presente: escuela obligatoria, laicidad, libertad de prensa, etc.
(≈300 metros), imaginada en 1874 por los ingenieros estadounidenses Clark y Reeves para la Exposición universal de 1876 en Filadelfia.]] Pero la sociedad de la época pone todavía más atención en los progresos técnicos y en el progreso social. Es esta fe en los beneficios de la ciencia lo que dio origen a las exposiciones universales. Pero desde la primera exposición (Gran Exhibición de los Trabajos de la Industria de todas las Naciones [Great Exhibition of the Works of Industry of All Nations], Londres, 1851), los gobernantes perciben rápidamente que detrás de la puesta tecnológica se perfila una vitrina política, y sería un error no aprovechar la oportunidad. Demostrando su destreza industrial, el país anfitrión muestra su adelanto y superioridad sobre otras potencias europeas, que reinaban entonces el mundo. Bajo esta visión, Francia acoge repetidas veces la Exposición Universal, en los años 1855, 1867 y 1878. Jules Ferry, presidente del Consejo de 1883 a 1885, decide revivir la idea de celebrar una exposición universal en Francia. El 8 de noviembre de 1884, firmó un decreto que establece oficialmente la celebración de una Exposición Universal en París del 5 de mayo al 31 de octubre de 1889. El año escogido no fue al azar, porque simboliza el centenario de la Revolución Francesa. París es una vez más el «centro del mundo». Aunque del lado del Nuevo Mundo las cosas evolucionan rápidamente y es al otro lado del Atlántico, en el seno de la joven potencia económica de los Estados Unidos de América, donde verdaderamente nacerá la idea de una torre de 300 metros. En efecto, en el momento de la Exposición universal de Filadelfia en 1876, los ingenieros americanos Clark y Reeves, imaginan un proyecto de un poste cilíndrico de 9 metros de diámetro sostenido por obenques metálicos, anclado en una base circular de 45 metros de diámetro, con una altura total de 300 metros. Por falta de créditos, su proyecto jamás verá la luz, aunque sería publicado en Francia en la revista Nature.
En la misma situación, el ingeniero francés Sébillot saca, en los Estados Unidos, la idea de una «torre-sol» de hierro que alumbraría París. Para ello, se une con el arquitecto Jules Bourdais, quien trabajaba en el proyecto del Palacio del Trocadero para la Exposición Universal de 1878. Juntos, concebirán un proyecto de "torre-faro" de granito, de 300 metros de altura que conocerá varias versiones, el cual competirá con el proyecto de torre de Gustave Eiffel, y finalmente, jamás será construido.
En junio de 1884, dos ingenieros de la empresa Eiffel, Maurice Koechlin y Émile Nouguier, jefe de la oficina de proyectos y el jefe de la oficina de métodos, respectivamente, estudian el proyecto de una torre metálica de 300 metros. Esperan poder hacer de ella el centro de atención de la Exposición de 1889. de 1884 por Maurice Koechlin, es el primer boceto de la torre de 300 metros, que más tarde se convirtió en la Torre Eiffel.]]
El 6 de junio exactamente, Maurice Koechlin realiza el primer croquis del edificio. El dibujo representa una torre alta de 300 metros, donde las cuatro caras curvas están unidas por plataformas cada 50 metros hasta llegar a la cumbre. Gustave Eiffel dice no estar interesado en el proyecto, sin embargo, les concede a los diseñadores la autorización para proseguir con el estudio.
Stephen Sauvestre, arquitecto en jefe de la empresa Eiffel es llamado para colaborar en el proyecto y vuelve a dibujar completamente el edificio para darle otra envergadura: añade un pesado pie de mampostería y une la torre hasta el primer piso mediante arcos, reduce el número de plataformas de cinco a dos, hace del diseño de la torre algo parecido a un faro, entre otros cambios.
Esta nueva versión del proyecto, embellecida con barniz decorativo, es presentada de nuevo a Gustave Eiffel, que en esta ocasión, se muestra entusiasta con el proyecto; hasta tal punto que deposita, el 18 de septiembre de 1884, en su nombre y los de Koechlin y Nouguier, una patente para «una nueva disposición que permita la construcción de pilas y torres de metal con una altura superior a 300 metros». poco tiempo después compra los derechos de Koechlin y Nouguier, para obtener los derechos exclusivos sobre la futura torre que, por lo pronto, lleva su nombre.
El genio de Gustavo Eiffel no reside en la concepción del monumento, sino en la energía que gastó a hacer conocer su proyecto a los gobernantes, a los responsables y al público en general, para poder construir la torre; y, cuando lo logró, en la inversión para hacerlo, que ante los ojos de todos, seguía siendo un simple desafío arquitectoral y técnico o un objeto puramente estético (o inestético según otros). También financió con sus propios fondos algunos experimentos científicos llevadas sobre o desde la torre Eiffel, los cuales permitieron perpetuarla.
, Ministro de Comercio durante 1886-1887 y Comisario General de la Exposición Mundial de 1889, será un ardiente defensor del proyecto de torre de Gustave Eiffel y establecerá un concurso que favoreció al ingeniero.]] Primero, tratará de convencer a Édouard Lockroy, el Ministro de Industria y Comercio de ese entonces, para que lanze un concurso que tenga por objeto «explorar la posibilidad de elevar en el Campo de Marte una torre de hierro con una base de 125 m² y una altura de 300 metros». Las modalidades de este concurso, efectuado en mayo de 1886, se parecen tanto al proyecto defendido por Gustave Eiffel que casi se podría creer que fue escrito de su propia mano. Por supuesto, Eiffel no lo hizo, pero es evidente que su proyecto tiene grandes posibilidades de ser elegido para figurar en la Exposición universal que se realizará tres años más tarde. Todavía tiene que demostrar que no es un objeto que sirve puramente de adorno, sino que puede cumplir otras funciones. Al poner delante de todo el interés científico en la torre, obtiene indudablemente algunos puntos a su favor.
Eiffel no conoce de antemano el resultado del concurso. La competencia se torna dura. 107 proyectos son presentados, pero finalmente Gustave Eiffel gana la competencia, lo que le permite construir su torre para la Exposición Universal de 1889, al igual que Jules Bourdais, quien hará lo suyo con el Palacio de Trocadero, quien en vez de usar hierro, prefirió el granito.
Enseguida se plantean dos problemas: el sistema de ascensores que no satisface al tribunal de selección, lo que obligó Eiffel para cambiar de proveedor, y la ubicación del monumento. Inicialmente, se considera colocar el edificio justo al lado del Sena o al lado del Antiguo Palacio del Trocadero (ahora Palais de Chaillot), pero finalmente se decide colocarlo justo sobre el Campo de Marte, lugar de la Exposición, y hacer de la torre una especie de puerta monumental.
La ubicación y la manera de construir y operar estarán sujetos a un acuerdo firmado el 8 de enero de 1887 entre Édouard Lockroy, Ministro de Comercio, quien actúa en nombre del Estado francés, Eugene Poubelle, prefecto del Sena, actuando en nombre de la ciudad de París y Gustave Eiffel, actuando por su propio nombre y no por el de su empresa. En esta acta oficial se especifica el coste estimado de construcción, que será de 6,5 millones de francos pagados en ese momento, además de aportar hasta 1,5 millones de francos por gastos no previstos (artículo 7); el resto será pagado por una sociedad anónima creada por Gustave Eiffel y financiada por él mismo y un consorcio de tres bancos, la cual tendrá como objeto específico la explotación de la torre. El texto también establece una serie de disposiciones, como:
Finalmente, el artículo 11 estipula que:
El 6 de mayo de 1889, la Exposición Universal abre sus puertas al público, que puede subir la Torre Eiffel a partir del 15 de mayo. Mientras que había sido desprestigiada durante su construcción, particularmente en febrero de 1887 por algunos de los artistas más célebres de la época, adquiere, durante la Exposición, un éxito popular inmediato, consiguiendo el apoyo de los visitantes. Desde la primera semana, a pesar de que los ascensores no funcionan todavía, 28.922 personas suben a pie en lo alto del edificio. Finalmente, de los 32 millones de entradas reservadas para la exposición, alrededor de 2 millones de turistas que visitan la torre.
El monumento, que entonces es el más alto del mundo (y lo sería hasta 1930 con la edificación del Edificio Chrysler en Nueva York), atrae también a algunas personalidades conocidas y a amigos de Gustave Eiffel, como su colega estadounidense Thomas Edison.
.]] La Torre Eiffel no es el único monumento que atrae a la muchedumbre, la inmensa "Galerie des machines" (Galería de máquinas, con 440 metros de largo por 110 metros de ancho) de Ferdinand Dutert y Victor Contamin o el "Dôme central" (Domo central) de Joseph Bouvard también atraen al público. Pero la verdadera novedad es el uso generalizado de electricidad, que permite juegos de luces asombrosos para la época.
Pero una vez terminada la Exposición, la curiosidad decae rápidamente y con ella el número de visitantes. En 1899, sólo se registran 149.580 entradas. Con el fin de volver a lanzar la explotación comercial de su torre, Gustave Eiffel baja el precio de los boletos de entrada, pero eso no impacta a las ventas. Habrá que esperar la Exposición universal de 1900, otra vez efectuada en París, para que vuelva a aumentar el número de curiosos. En esta ocasión, más de un millón de entradas son vendidas, lo que está muy por encima de las cifras de los diez años anteriores, pero muy por debajo de lo que se permitirían para el mantenimiento de la torre. En efecto, no sólo las entradas son dos veces menos numerosas que en 1889, sino que la disminución de ventas es más preocupante teniendo en cuenta el hecho de que los visitantes de la Exposición universal de 1900 eran más numerosos que en 1889.
La caída del número de entradas continúa desde 1901, de modo que el futuro de la torre no está asegurado después del 31 de diciembre de 1909, fin de la concesión estipulada. Algunos incluso sostienen la idea de que puede ser destruida.
Consciente de este peligro, Gustave Eiffel, que había imaginado desde el principio que la torre pudiera servir de un punto de vista científico, multiplica los experimentos llevados en el monumento. El ingeniero, fuera del negocio desde 1893 en respuesta a su implicación en el escándalo del canal de Panamá, financia una parte de estos experimentos.
(1868-1932), general y científico francés, pionero de la radiodifusión que perfeccionó el telégrafo sin hilos (TSH), gracias a la instalación de una antena en la cima de la Torre Eiffel.]] En 1889, Eleuthère Mascart, el primer director de la Oficina central Meteorológica de Francia creada en 1878 (antepasada de la actual "Météo-France" (Meteorología Francia), hace instalar, con la autorización de Gustave Eiffel, una pequeña estación de observación en lo alto de la torre. En octubre de 1898, Eugène Ducretet establece la primera conexión telefónica hertziana entre la torre Eiffel y el Panteón de París, distante 4 kilómetros. En 1903, el capitán Gustave Ferrié, militar de su estado, procura establecer una red telegráfica sin hilo, pero no obtuvo el financiamiento del Ejército, ya que en aquella época se privilegiaba a las señales ópticas y las palomas mensajeras, por considerarlas más fiables. A pesar de la situación, Gustave Eiffel financia con su dinero el proyecto del capitán aceptando que instale una antena en la cumbre de su torre. El experimento es un éxito y, como ahora sabemos, será la tecnología del futuro. En 1909, un pequeño túnel de viento se construyó a los pies de la Torre Eiffel, este será sustituido a partir del 1912 por un túnel de viento mucho más grande. La red TSH de uso estrictamente militar instalado en el emisor de la Torre Eiffel se utilizará para uso civil a partir de la década de 1920. Desde 1921, algunos programas de radio se emiten periódicamente desde la Torre Eiffel; Radio Torre Eiffel, bien conocida por los parisinos se inauguró oficialmente el 6 de febrero de 1922. En 1925, la Torre Eiffel sirve como marco para el inicio de la televisión en Francia. La técnica sigue mejorando y las emisiones siguen siendo experimentales entre 1935 y 1939. La televisión se difunde luego en los hogares, primero en blanco y negro, luego en color. En 1959, la instalación de un nuevo mástil de teledifusión hace llegar la altura de la torre a 320.75 metros y transmite a 10 millones de personas. Finalmente, en 2005, una emisora de televisión digital terrestre es instalado.
La Torre Eiffel es, por lo tanto, un potencial científico que merece ser explotado; algo de lo que se dan cuenta las autoridades, quienes en 1910 deciden ampliar la concesión y explotación durante otros setenta años. La torre resulta más útil en el punto más alto de la región de París ya que su emisora de TSH resulta de gran importancia estratégica durante la Primera Guerra Mundial. Gracias a la torre Eiffel, varios mensajes decisivos son captados, entre los que se cuenta el «radiograma de la victoria», que frustró el ataque alemán en el Marne, o los que envió la hoy famosa espía Mata Hari.
La sociedad de administración de la torre cambia y la torre sufre un cambio importante con ocasión de la Exposición especializada de 1937: las decoraciones pasadas de moda del primer piso son quitadas y se instala una nueva iluminación.
observan cómo la bandera tricolor francesa es colocada en la torre durante la Liberación de París.]] En 1944, la torre logra sobrevivir a un incendio provocado por las autoridades alemanas durante la ocupación alemana de Francia y es utilizada para comunicarse con las tropas, primero por la Wehrmacht, luego por los Aliados durante la Liberación de París.
A partir de 1960, el turismo internacional en masa comienza a crecer, lo cual tiene consecuencias directas sobre el número de visitantes a la torre, que se levanta abruptamente hasta alcanzar los 6 millones de visitantes por año (límite rebasado hasta 1998), lo que exige una renovación de la torre. Extendiéndose hasta 1985, la obra se se remodela centrándose en tres características principales:
De este modo, la torre Eiffel será aliviada de 1.340 toneladas superfluas, se repintará y tratará contra la corrosión, los ascensores de la tercera plataforma serán sustituidos, se inaugurará el restaurante gourmet Le Jules Verne y se instalará un dispositivo de iluminación compuesto por 352 proyectores de sodio.
Desde los años 1970, la Torre Eiffel obtuvo más popularidad y se ganó un lugar en el espíritu colectivo mundial, además de convertirse en uno de los símbolos más conocidos de Francia.
El 26 de diciembre de 1978, Thierry Sabine celebra el primer Rally Dakar de Trocadero, a los pies de la Torre Eiffel. Varios conciertos masivos también se efectuarán allí: Jean-Michel Jarre en 1995 y Johnny Hallyday en 2000. Por último, un gran número de películas, particularmente estadounidenses, explotan el inconsciente colectivo para representar en un solo plano París o Francia con una sola secuencia que muestra a la Torre Eiffel.
En 2002, el límite de 200 millones de billetes es rebasado y en 2004, se convierte en el 5º monumento más visitado de Francia.
El 1 de enero de 2006, se abre un nuevo período de administración de 10 años, el concesionario es la empresa de economía mixta SETE (Sociedad de Explotación de la Torre Eiffel), aunque el 60% del capital es obstentado por la ciudad de París.
Los textos que declaran a los operadores de la Torre Eiffel son los siguientes:
Algunos artículos, a menudo propangandistas, se publican a lo largo del año 1886, incluso antes de que comienzaran los trabajos de construcción. En febrero de 1887 cerca de trescientos artistas (escritores, pintores, compositores, arquitectos, etc.) unen sus fuerzas para denunciar «la inútil y monstruosa Torre Eiffel» en la hoy célebre carta abierta Protesta de los artistas contra la torre del Sr. Eiffel. Entre estos artistas se encontraban: Guy de Maupassant, Charles Gounod, Victorien Sardou, Charles Garnier, François Coppée, Sully Prudhomme, Leconte de Lisle, William Bouguereau (todos en la imagen de la izquierda, en orden de arriba a abajo y de izquierda a derecha), además de Alexandre Dumas (hijo), Ernest Meissonier, Joris-Karl Huysmans y Paul Verlaine.
En la carta se podían encontrar calificativos para la torre como:
Sin embargo, algunos autores modernos considera la torre como un poderoso símbolo en particular, y una vanguardia en general. .]]
Algunos artistas como Georges Seurat y Paul-Louis Delance pintan la Torre Eiffel incluso antes de que finalice su construcción. En 1889, el pintor Roux representó La noche de vacaciones en la Exposición Universal 1889 y Jean Béraud la muestra al fondo en su obra Entrada a la Exposición de 1889.
Después, varios pintores se inspiraran directamente en el edificio para realizar algunas representaciones que responderán a corrientes artísticas diversas: Henri Rousseau, Paul Signac, Pierre Bonnard, Maurice Utrillo, Marcel Gromaire, Édouard Vuillard, Albert Marquet, Raoul Dufy, Marc Chagall, o todavía Henri Rivière.
Pero el más prolífico pintor inspirado por la Torre Eiffel fue Robert Delaunay, que hace de la torre el objeto central de una treintena de lienzos, realizados entre 1910 y 1925.
La Torre Eiffel también atrajo a numerosos cantantes, el lugar servirá para espectáculos con posibilidades excepcionales, tanto para el artista como para el público. De esta forma, el 25 de septiembre de 1962, para el lanzamiento de la película El día más largo, el productor Darryl F. Zanuck organiza un espectáculo musical de grandes dimensiones en París; en esta ocasión, Édith Piaf, acompañada por 1.500 cohetes de fuegos artificiales, canta desde el primer piso de la torre delante de 25.000 parisinos. En 1966, para el lanzamiento de la campaña mundial contra el hambre, Charles Aznavour y Georges Brassens cantaron allí. El 14 de julio de 1995, fue el turno de Jean-Michel Jarre para dar un concierto a los pies de la Torre Eiffel con motivo de la celebración del 50 aniversario de la Unesco, ante más de un millón de espectadores. Finalmente, el 10 de junio de 2000, Johnny Hallyday ofrece allí un concierto y un espectáculo pirotécnico delante de 600.000 personas, y grabará su disco 100% Johnny: Live a La Tour Eiffel.
En fotografía, la mayoría de los artistas de renombre internacional han hecho de la torre objeto de sus fotografías, ya sea como objeto de fondo o como tema central.
En literatura, la Torre Eiffel ha sido abordada más de una vez por los escritores. Y sea como tema central de un libro o como un simple decoración, ha salpicado la creación literaria desde el siglo XIX hasta nuestros días. Pero debido a que el efecto de novedad y moda del munumento se disipa, el monumento aparece cada vez menos frecuentemente en la literatura contemporánea de finales del siglo XIX y la primera mitad del siglo XX.
También cabe destacar que los autores que se han ocupado de la construcción en su mayoría franceses, o por lo menos, francófonos.
En el momento de su construcción y la pronta puesta en funcionamiento, el monumento fue objeto de análisis críticos personales, la mayoría de las veces publicados en periódicos de la época y muchas de las veces tales criticas eran negativas. Los temas tratados por los artistas eran, la mayoría de las veces, enfocados al desafío técnico, industrial y comercial que la torre representaba en esa época. Además criticaban su influencia sobre Francia en el extranjero, el aspecto estético (o inestético) de la torre y el interés científico potencial que poseía (o su inutilidad).
Posteriormente, ante el éxito popular se ganó entre el público, muchos escritores revocaron sus consideraciones y desaparecieron sus criticas anteriores.
Sin duda es Roland Barthes quien mejor describe este sentimiento de atracción/repulsión de los artistas frente a la Torre Eiffel:
, escrita en 1890. El escritor se muestra crítico hacia la torre Eiffel. Desde las primeras líneas, se puede leer: «dejé París y hasta Francia, porque la torre Eiffel acababa por aburrirme demasiado [...]».]] En las novelas, se ha abordado de diversas formas: Léon-Paul Fargue revalora el análisis crítico de sus iguales durante los inicios de la torre (El peaton de París, 1932-1939), junto con Pierre Mac Orlan, al tiempo que recuerda que en un principio, para los artistas «vituperear contra la torre [...] era una patente de sensibilidad literaria y artística». Otros autores destacan el interés científico y militar que posteriormente fue reconocido a la torre (La Tour, Javel et les Bélandres, Villes, en Œuvres complètes).
Finalmente, otros como Pascal Lainé se concentran en la historia del diseño, la construcción y los años iniciales de funcionamiento de la torre a través de una narración romántica (El Misterio de la Torre Eiffel, 2005). En este mismo tema, Dino Buzzati, en su obra "Le K.", realiza una puesta en escena ficticia de obreros que han trabajado en la construcción de la torre durante 1887 y 1889. Sin embargo, Buzatti procede de distinta forma a Lainé, su texto es una noticia, no una novela, y el tono utilizado es fantástico y no realista como Pascal Lainé.
En poesía, Guillaume Apollinaire la hizo un caligrama nacionalista (Calligrammes, 1918) y un texto que René Étiemble considera, en Ensayos de literatura (verdaderamente) general, como un ejemplo de haïku occidental («Pastora ô torre Eiffel / El rebaño de los puentes/Bala esta mañana»). En julio de 1888, François Coppée, ataca a la torre, a la que se refiere como «mástil de hierro difícil de abordar/Inconclusa, confusa, deforme», además de «símbolo de fuerza innecesaria», de «monstruosa y pérdida de trabajo» o incluso «mástil ridículo» (Sobre la Torre Eiffel, la segunda meseta, Poemas). En mayo de 1889, mediante poesía interpuesta, Raoul Bonnery le responde: «Pusiste la flor de tu ciencia/Al llamarme «Monstruo horroroso»/un poco más reconocimiento/Te hubiera convecido un poco más»., o todavía «Cual sangre en tus venas circula/Para exclamar con desprecio,/Que soy un mástil ridículo/Sobre el buque de París./¿ Un mástil? Acepto el epíteto,/Pero un mástil orgulloso y audaz,/ Que sabrá, llevando altura la cabeza,/ Hablar de progreso hasta los cielos.» (La Torre Eiffel a François Coppée, el día de los 300 metros, en Le Franc journal). A diferencia de los ejemplos anteriores, Vicente Huidobro, Blaise Cendrars y Louis Aragon rinden homenaje (respectivamente en sus obras Norte-Sur, Nº 6-7, de 1917; La torre en 1910 en Diecinueve poemas elásticos, de 1913; y La torre habla en La Torre Eiffel de Robert Delaunay). Pierre Bourgeade, en una noticia titulada La Suicida, relata, vía el testimonio de un guardián, el suicidio de una desconocida que ha saltado del 3er piso de la torre (en Los Inmortales, Gallimard, 1966).
En el teatro, la torre fue objeto en las piezas Una visita a la exposición de 1889, comedia ligera en 3 actos y 10 cuadros (Henri Rousseau) y Los Novios de la torre Eiffel (Jean Cocteau, 1921).
El monumento del Campo de Marte también ha sido tratado bajo formas particulares: como periódico (Jules de Goncourt y Edmond de Goncourt, Journal, tomo VIII, 6 de mayo y 2 de julio de 1889); como cuento de viaje (Guy de Maupassant, La vie errante, 1890), donde el escritor expresa su asco por la torre Eiffel; o como estudio semiológico (Roland Barthes, La Torre Eiffel, 1964); pero también ha sido abordada como prefacio de libros, en un discurso en alguna conferencia, en un artículo de revista, etc.
Tan pronto como la ingeniería cinematográfica comenzó a desarrollarse, la Torre Eiffel fue rodeada por los cineastas más ilustres, pero en primera instancia, únicamente bajo la forma de documental (Panorama durante la ascensión de la Torre Eiffel, Luis Lumière, 1897); Imágenes de la exposición 1900, Georges Méliès, 1900).
La primera ficción con la Torre Eiffel como la principal decoración es un metraje francés, Paris qui dort (París que duerme, René Clair, 1923). En esta película corta (35 minutos), un científico sumerge París en el sueño y un puñado de hombres y mujeres que se refugiaron en las alturas de la Torre Eiffel, más allá de la suerte de los demás habitantes de la capital.
En 1930, con La Fin du monde (El fin del mundo), Abel Gance dirigió el primer largometraje (1 hora 45 minutos) y empuja la investigación para resaltar la belleza de las estructuras de la torre.
En los años 1940, las imágenes transmitidas por la Torre Eiffel comienzan a integrarse en las películas americanas. De esta forma, Ninotchka, uno de los mayores éxitos del director estadounidense de origen alemán Ernst Lubitsch, utiliza las imágenes de la Torre Eiffel de una manera simbólica.
En 1949, Burgess Meredith realiza L'Homme de la tour Eiffel (El Hombre en la Torre Eiffel), la primera adaptación cinematográfica de una novela de Georges Simenon. Charles Laughton encarna al Comisario Maigret, quien debe resolver un asesinato cometido en la Torre Eiffel, lo que hace ver al edificio varias veces en escena en busca de pistas.
El 4 de junio de 1966, es difundido el primer telefilme importante que tiene un informe con la torre Eiffel, La Rose de fer (La Rosa de hierro), 39º episodio de la primera serie Cinq Dernières Minutes. (Los Cinco Últimos Minutos, 1958-1973).
A partir de los años 1980, la Torre Eiffel aparecerá en varias producciones americanas. En 1985, en la película En la mira de los asesinos (A View to Kill), la decimocuarta película de James Bond producida por EON Productions y la última de siete películas de Roger Moore en este papel, muestra a la Torre Eiffel en una película de acción (la cual contó con un presupuesto de $30.000.000 dólares y con $152.400.000 de dólares en ingresos totales). Por otra parte, en la película Rush Hour 3, hay una escena de lucha impresionante que sucede en la Torre Eiffel.
Después el cine americano será cada vez más frecuente en apariciones de la torre, particularmente para efectos práctico y simbólicos. Permite, en efecto, significar en un solo plano o una sola secuencia, incluso muy corta, que la acción se sitúa en Francia, o en París. Ya en 1953, Byron Haskin la muestra destruida en su adaptación de